Artemio Hernández Parra, juez de paz de la comunidad de San Juan Tahitic, en el municipio de Zacapoaxtla y reconocido opositor a la instalación de una hidroeléctrica de la empresa Gaya en el río Apulco, fue asesinado con cinco disparos de arma de fuego.

El homicidio ocurrió la noche del 23 de junio, después de la quema de un “castillo” y otros juegos pirotécnicos, durante la fiesta patronal de esta población de la Sierra Nororiental. En medio del festejo, Artemio Hernández Parra recibió cinco disparos a quemarropa.

De acuerdo con activistas y ambientalistas, “se trata de un juez que había apoyado la causa indígena contra la construcción de una hidroeléctrica y es el tercer asesinato vinculado con esa megaobra en apenas un mes”.

El pasado 1 de junio, Adrián Tihuilit, defensor de los bienes comunales de San Juan Tahictic y opositor a la construcción de la hidroeléctrica Gaya, fue encontrado muerto de un disparo en la cabeza en una cañada en el municipio de Zacapoaxtla.

Antes, el 14 de mayo fue encontrado sin vida el también activista Manuel Gaspar Rodríguez, quien encabezó movimientos contra diversos proyectos en el municipio de Cuetzalan, como integrante del Movimiento Independiente Obrero, Campesino Urbano y Popular (MIOCUP).